Con la llegada del verano, los desplazamientos en carretera se multiplican, por lo que las posibilidades de que ocurra un accidente son mayores, especialmente en las operaciones salida que la Dirección General de Tráfico (DGT) pone en marcha durante este período con el fin de evitar problemas en la carretera. Muchos de los fallos en la carretera son humanos, pero los elementos del coche pueden sufrir algunos problemas con las altas temperaturas.

Según la DGT, el calor del verano puede causar un deterioro prematuro de la batería de nuestro vehículo. La batería está diseñada para funcionar a unos 25 grados, por lo que si esa temperatura se altera, su rendimiento podría verse afectado porque las moléculas de azufre se descomponen más rápido.

De esta forma, la DGT proporciona en su web una serie de consejos para no deteriorar la vida útil de la batería de nuestro coche:

Revisar la batería

En primer lugar, es recomendable revisar periódicamente la batería y el sistema eléctrico. Esto debe hacerse de forma habitual, y debemos asegurarnos que todo funciona correctamente. Para ello, es recomendable evitar el uso simultáneo de diferentes sistemas eléctricos del coche, como luces, aire acondicionado o la radio.

Evitar el calor y comprobar el ácido

La DGT también recomienda proteger el coche de las altas temperaturas para que este no supere los 50 grados, temperatura que puede reducir la vida útil de la batería. Por otro lado, es necesario examinar los niveles de ácido de la batería y no dejar que ninguna de las celdas tenga falta de líquido.

Inspeccionar la carga de la batería y conducir eficientemente

Por último, la DGT aconseja comprobar el sistema de carga de la batería antes del invierno y del verano. Cuando estamos mucho tiempo sin utilizar el coche, a veces solo hay que recargarla, no cambiarla. Además, conducir de manera progresiva y eficiente para no desgastar las piezas del coche.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *